La junta ejecutiva permanente de la Organización Colegial Veterinaria (OCV), en la sesión celebrada ayer en Madrid, ha aprobado la propuesta de promover un seguro específico y gratuito para todos los veterinarios colegiados en España, destinado a reforzar su protección, seguridad y bienestar en el ejercicio diario de la profesión, incluida la defensa en procedimientos iniciados por la Administración Pública relacionados con su actividad.
Se trata de una medida concreta y cercana al colegiado, que da una respuesta dirigida a abordar los problemas reales de la profesión, refuerza el compromiso de la Organización de ofrecer avances tangibles para los veterinarios y se suma al trabajo que la junta viene desarrollando en esta línea antes de cumplir los primeros 60 días de mandato.
La iniciativa, que figura en el borrador de los presupuestos de la Organización para 2026 y que deberá refrendar la asamblea general de presidentes del próximo mes de diciembre, supone una mejora sustancial en la protección de los veterinarios colegiados, en un momento en el que existe preocupación por el aumento de casos acoso en redes y amenazas a los veterinarios en su trabajo diario.
La propuesta de la compañía ARAG contempla una cobertura integral frente a las agresiones a los más de 38.000 veterinarios colegiados en nuestro país, con prestaciones como asistencia jurídica telefónica, reclamación de daños corporales, protección personal en casos de amenazas, injurias, calumnias o acoso con procedimiento penal, y defensa en procesos iniciados desde la Administración Pública derivados del ejercicio profesional.
Asimismo, incluye una cobertura económica adicional con el pago de un subsidio diario de 60 euros durante un máximo de 20 días, en el caso en que el veterinario sufra una agresión durante su labor que le incapacite temporalmente, y cuando exista una denuncia del hecho.
Presiones de propietarios y rígida regulación administrativa
El presidente de la Organización, Gonzalo Moreno del Val, destacó que “la medida busca ofrecer un mayor respaldo a los profesionales veterinarios en el ejercicio de su labor, para que, pese a las presiones recibidas por parte de los propietarios de animales, por el alto grado de exigencia, o por parte de las administraciones, por regulaciones cada vez más rígidas, se sientan amparados y protegidos en la práctica de su profesión. Es una muestra del compromiso de la junta ejecutiva con el bienestar de los profesionales y con la defensa activa de su labor sanitaria y social”.
“La OCV seguirá trabajando con las administraciones para la mejora de la normativa y el reconocimiento del papel veterinario, pero es importante seguir avanzando en medidas concretas que respondan a las necesidades inmediatas de quienes sostienen nuestra profesión cada día”, añadió Moreno del Val.
En este sentido, la entidad continúa inmersa en los trabajos institucionales y legislativos encaminados a revisar y mejorar la regulación vigente sobre el medicamento veterinario y otros aspectos clave para el ejercicio profesional. Este diálogo técnico con las administraciones constituye una prioridad estratégica para alcanzar soluciones duraderas que fortalezcan la sanidad animal y la salud pública, siempre desde el rigor y la responsabilidad que caracterizan a la profesión veterinaria.