Rufino Álamo, María Luisa Fernández, Javier Padilla, Gonzalo Moreno y José Ramón Caballero, hoy en el Ministerio de Sanidad
El presidente de la Organización Colegial Veterinaria (OCV), Gonzalo Moreno del Val, se ha reunido hoy con el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ante el que ha subrayado la “ingente contribución de los veterinarios a la salud pública a través de la prevención, no siempre reconocida”, y ha demandado por ello “medidas reales y efectivas” dentro del enfoque Una Sola Salud en las políticas del Ministerio de Sanidad.
Acompañado del secretario general, José Ramón Caballero, de la presidenta del Colegio de Veterinarios de Tenerife, María Luisa Fernández, y del de Valladolid, Rufino Álamo, Gonzalo Moreno se ha referido a la “relevante labor del veterinario en la preservación de la salud, desde diferentes vertientes, por lo que somos una parte esencial de la sostenibilidad del sistema sanitario. Una realidad que debe tenerse en cuenta permitiendo el acceso de nuestra profesión a la especialidad de Salud Pública del Sistema Nacional de Salud, como sanitarios que somos”.
En el encuentro, que ha tenido lugar en el Ministerio de Sanidad en un ambiente cordial, Javier Padilla y su equipo se han mostrado muy receptivos los planteamientos de la OCV, sobre todo en este último punto relativo a las especialidades.
El presidente de la corporación que engloba a más de 38.000 veterinarios y veterinarias de todo el país ha ofrecido la colaboración de la profesión ante distintos retos para la salud pública, como la creciente incidencia en humanos de las enfermedades transmitidas por vectores artrópodos (Virus del Nilo, Crimea-Congo, leishmaniosis…), fenómeno relacionado con el cambio climático por el aumento de temperaturas, “lo que obliga a reforzar la vigilancia y la prevención por parte de los Servicios de Salud Pública, no ya solo en verano, sino en otras épocas, y disponer de más recursos”.
En lo relativo al ejercicio clínico, los asistentes han expuesto a Javier Padilla que no es posible comparar de manera directa el ejercicio de la medicina humana y veterinaria, y por ello no puede regularse de igual manera. “En los medicamentos, en Europa, y otros países como Reino Unido o EEUU prima otro modelo, en el que los veterinarios pueden suministrar medicamentos a sus pacientes, y esto tiene beneficios para ellos pero también para la salud pública”, explicaron.
Dificultad de tratamiento
Para la Organización, la falta de libertad de prescripción a la que se está sometiendo a la profesión veterinaria “supone un problema grave para la salud y el bienestar animal, pero también para la salud pública. Por ejemplo por la dificultad de tratamiento de algunas zoonosis, como leishmaniosis, leptospirosis, psitacosis o fiebre Q”.
Además, la OCV considera que la rigidez de la normativa del medicamento puede agravar el problema de las resistencias, al realizar un seguimiento estricto de las fichas técnicas o no poder utilizar antibióticos de humana de categoría D por ejemplo cuando no existen en veterinaria.
“Debe entenderse que la importancia de la salud animal en la humana va más allá de las zoonosis. Hay una influencia a nivel mental, cardiológico, o implicaciones en investigación como con la oncología comparativa, y así se lo hemos trasladado al secretario de Estado, al igual que la demanda de la reducción del IVA. Su repercusión sobre la salud pública, la salud de todos, es evidente”, apuntó Gonzalo Moreno.
Medidas efectivas dentro del modelo One Health
Además, los asistentes han explicado la necesidad de desarrollar medidas efectivas para la implantación real del concepto One Health y que se valore la habitual aportación de la veterinaria en la salud pública. “Como ejemplo, se puede poner el anteproyecto de amenazas para la salud al que acabamos de enviar alegaciones. En él no se tenía realmente en cuenta ni la salud animal, ni a los veterinarios, y existía un claro desequilibrio hacia medidas destinadas a valorar la salud ambiental”, apuntó Moreno.
Así mismo, se ha insistido en la labor de la veterinaria en situaciones de catástrofe, así como en la garantía de inocuidad de los alimentos, en la atención a los animales o en los planes de control de plagas DDD (desratización, desinsectación y desinfección).
Respecto a las especialidades del Sistema Nacional de Salud, la OCV ha resaltado la necesidad de reforma de la normativa para incluir a la veterinaria en las especialidades interdisciplinares. Finalmente, se ha solicitado la inclusión dentro del programa de salud mental, como una acción específica, el programa integral de atención veterinario enfermo, en coordinación con el PAIME.